Agendas Ciudadanas

¿Qué son las agendas ciudadanas anticorrupción?

Las agendas ciudadanas anticorrupción son un conjunto de propuestas diseñadas por actores de la sociedad civil a favor del combate a la corrupción de la esfera gubernamental.

Las agendas buscan los objetivos siguientes:

  • Visibilizar la voz de la ciudadanía en el tema anticorrupción dentro del marco de los sistemas locales anticorrupción.
  • Empoderar a los actores de la sociedad civil, principalmente de los sectores en condiciones de vulnerabilidad, mediante sus propuestas dentro de los sistemas locales anticorrupción bajo una lógica de colaboración.
  • Sistematizar las propuestas de la sociedad civil a fin de ser promovidas en los diversos actores que integran los sistemas locales anticorrupción.

¿Cómo se construyen las agendas ciudadanas anticorrupción?

Las agendas son producto del trabajo dentro del mecanismo de colaboración con los SLA y CPC. En ese sentido se debe contar con la colaboración de los integrantes de los SLA y en especial, los CPC, para el desarrollo del mecanismo y para la integración de las agendas. El papel de AKM y Locallis es central para coadyuvar y sistematizar las agendas junto con los actores locales de la sociedad civil.  

Las agendas deberán adquirir la legitimidad en tanto se tratará de un ejercicio colectivo y de voz a los diversos sectores de la sociedad civil. La promoción y difusión de las agendas depende de los actores civiles participantes.

Respecto a los contenidos las agendas no se trata de un conjunto de demandas inconexas; un listado de planteamientos que no reflejen la integralidad ni la colectividad de los actores participantes. Las agendas deben situarse bajo una perspectiva en la que no se centre en los efectos de las acciones de la corrupción, sino en sus causas, en acciones de prevención. Basarse en el concepto de corrupción que maneja el proyecto.

Se trata no sólo de señalar los actos de corrupción, sino las causas que los producen y en dónde se producen de manera más evidente en los entes públicos. Las agendas deberán permitir la ubicación de los mapas de riesgos, los espacios de opacidad, falta de transparencia y prácticas deshonestas de los servidores públicos y de autoridades.

Con la construcción de las agendas ciudadanas anticorrupción no se trata de volver a “refritear” lo que ya se tiene registrado en la opinión pública (lugares comunes), sino de tener una lectura más compleja e integral de las problemáticas, incluyendo algunas propuestas.

Las agendas anticorrupción tienen como una posible aplicación generar insumos para la co-creación, re-creación de las bases para la formulación y diseño de una política local anticorrupción con un enfoque “de abajo hacia arriba”.

En la construcción de las agendas ciudadanas se retomará la metodología utilizada en los ejercicios locales de gobierno abierto: sensibilización, mesas de trabajo, planes de acción, monitoreo y evaluación.

En las agendas ciudadanas se podrán incorporar asuntos con distintos enfoques: de formulación de política, de implementación, de fortalecimiento de capacidades.

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